La gente que tiene asma puede hacer más que practicar deporte, incluso puede llegar a destacar en el deporte.
El deporte además es muy recomendable en personas con asma ya que ayudará a mantener la forma, a mantener un peso saludable y a fortalecer los músculos pectorales que participan en la respiración además de las ventajas propias del deporte, pues si hacemos actividad física de forma regular tendremos fantásticos efectos beneficiosos sobre la salud emocional, ya que al hacer ejercicio, el cuerpo fabrica endorfinas, unas sustancias químicas que hacen que la persona se sienta más tranquila y feliz.
Las personas que tienen asma antes de hacer deporte, tienen que tener el asma bien controlado, es decir, no deberían estar teniendo muchas crisis. La mejor forma de tener el asma bajo control es seguir al pie de la letra el tratamiento que te haya dicho tu médico, tomándote todos los medicamentos que te haya recetado incluso cuando te encuentres bien. Es muy muy muy importante no saltarse ninguna de esas tomas pues si te saltas alguna tus síntomas podrían empeorar.
Unos consejos para reducir e intentar que los ataques de asma sean menos fuertes es evitar los entrenamientos al aire libre cuando los niveles de polen y esporas sean altos, llevar el cuello bien abrigado en los entrenamientos al aire libre durante los meses de invierno, respirar por la nariz en vez de la boca, calentar antes de empezar y también hacer ejercicios de enfriamiento al finalizar el entrenamiento.
Para finalizar estos breves consejos solo os digo que tengáis especial cuidado por los pequeños detalles, pues son estos los que marcan la diferencia.
Un saludo a tod@s!!!
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